jueves, 6 de agosto de 2009

Honor y memoria

Hola hermanos, yo no vengo a cantar
mi nombre es Sudamérica
y mi historia yo les vengo a contar
por no ocultar lo que uno piensa.
Hace cinco siglos que me conocen
pero mileños puedo atestigüar
y hablarles de civilizaciones
que ni en sueños podrán imaginar.
El paraíso, el nuevo mundo
el nuevo hogar de usureros
predicadores de lo absurdo
pre-dictadores traicioneros.
Mala palabra fue libertad
mala palabra educación
y ni hablar de la igualdad
o del futuro, o la revolución.
Nuestros próceres cuelgan en retratos
pero su historia no está en el revés
pues aún libertadores, los han callado
por no responder al imperialismo burgués.
Hoy mi América está perdida
y mis hijos no pueden crecer,
les han quitado la tierra, la comida,
los juegos, las ganas de aprender.
De Bolivia quisieron la plata
y Potosí se secó de llover.
De Brasil pidieron el oro
y Centroamérica comenzó a perder.
Esta es nuestra tierra hermano, y sabés una cosa?
Esta historia tiene sus años
Manchados de honor y memoria.
Se acercó un nuevo siglo y las cosas cambiaron
ya no éramos europeos
algo se gestaba en el norte americano
demócratas bucaneros.
Nos dijeron cómo pensar, qué decir
y seguir sus fundamentos
para donde debíamos mirar, criticar
o condenar lo “no correcto”.
El extranjero, el violador
barbudo, insurrecto y ateo
el rebelde, agitador
que criticaban al imperio!
Mala palabra fue popular
mala palabra progresión
y ni hablar de sociedad
memoria, y revolución.
Nuestros próceres son tergiversados
y su historia no se debe conocer
pues aún libertadores, los censuraron
y murieron pobres como aquel y usted.
Hoy se ven las venas abiertas
de mi América Latina,
nos han saqueado el pasado, la tierra
nos criaron en la mentira.
De Venezuela quisieron metales
y de México todo el poder.
En Perú la tierra se abre
y Argentina siempre ha de perder.
Esta es nuestra tierra hermano, y sabés una cosa?
Esta historia tiene sus años
Manchados de honor y memoria.

Para Ernesto, León, José, Fidel, Hugo, Rodolfo, Jorge, Túpac, San Martín, Simón, Francisco, Juana, Sor Juana, y tantísimos otros: Napay pachamama, wan qispichiy